El director de la Región Sanitaria de Central (11ª), Dr. Roque Silva, manifestó su felicidad por la gran cantidad de personas vacunadas contra el COVID-19 entre el sábado y el domingo, que casi alcanzó las 50.000. En contrapartida, lamentó el récord de fallecidos por la enfermedad en un fin de semana.
“Feliz por un lado, porque se ha vacunado a mucha gente en estos días. La gente quiere vacunarse y eso estimula bastante. Los vacunatorios deben recibir a esta misma cantidad de gente para su segunda dosis, multiplicar los mismos para poder evitar mezclar a todos. Esto va a generar un impacto demasiado importante. A la gente quizás le moleste el tema de las donaciones, pero lo importante es poder contar con las vacunas. Esperamos que todo esto vaya acelerando, porque disponibilidad de dosis se tiene”, dijo Silva en conversación con Cada Mañana por La Unión.
En ese orden, manifestó su alegría también porque se, con la masiva vacunación, se combate a las personas que rechazan las dosis argumentando supuestas conspiraciones. “No hay que permitir que los antivacunas te quiten la felicidad de recibir las dosis”, expresó Silva.
En contrapartida, lamentó la alta cifra de 263 muertos que dejó la enfermedad en un solo fin de semana, según el reporte del Ministerio de Salud.