El 14 de diciembre de 1980, seis días después de la muerte de John Lennon, su viuda, Yoko Ono, organizó una vigilia en honor al ex Beatle.
Esta vigilia constó de diez minutos de silencio aproximadamente a las 14:00 (hora de EE UU) alrededor del mundo. En Central Park, ubicado en Nueva York, se reunieron unas 100.000 personas, mientras que, en la cuna de Lennon, Liverpool, la reunión fue algo menos concurrida.