El artista británico se encuentra con su familia en Cerdeña (Italia), donde suelen veranear cada año. Es uno de los lugares más exclusivos del mundo para los famosos, por lo que es el paraíso para los paparazzi.
Las fotos publicadas por el «Daily Mail» muestran un momento de lo más extraño. Después del almuerzo, el compositor se dispone a volver a la lancha que lo llevaría hasta el yate, hasta ahí todo normal. Pero… como lo hace es lo extraño, sus guardaespaldas lo levantan para que no toque el agua.
No sabemos si es que tenía algún problema de movilidad que le impedía subir por sí solo… estaba cansado de la caminata o simplemente que no quería mojarse los pies antes de subir a la lancha. Sea como fuere, el resultado fue este: